Autor: Dr. Luis Sevinsky, Dermatólogo
Los bioestimuladores son sustancias diseñadas para estimular la producción de colágeno y fibras elásticas en la piel. A diferencia de los rellenos dérmicos, que aportan volumen de forma inmediata, los bioestimuladores actúan gradualmente, promoviendo una mejora sostenida en la calidad cutánea, firmeza y elasticidad.
Este tipo de tratamiento es especialmente efectivo en zonas con signos iniciales de flacidez, como mejillas, sienes y contorno mandibular. Al activar la regeneración interna del tejido, se logra un efecto tensor y revitalizante sin modificar los rasgos naturales del rostro.
El procedimiento se realiza mediante el uso de cánulas, un tipo de instrumento más seguro que las agujas convencionales. Las cánulas permiten distribuir el producto en vectores estratégicos de tensión, lo que favorece el levantamiento y reafirmación de la piel sin generar traumas innecesarios. Además, este método reduce significativamente el riesgo de hematomas o lesiones vasculares, lo que se traduce en una recuperación más rápida y cómoda para el paciente.
Los bioestimuladores que se emplean en la consulta del Dr. Sevinsky son biocompatibles y seguros, lo que significa que no generan reacciones alérgicas y son absorbidos de manera natural por el organismo. Entre los más utilizados se encuentran:
Hidroxiapatita de calcio
Ácido poliláctico
Combinaciones de ácido hialurónico con hidroxiapatita de calcio
Ácido hialurónico de alta pureza con efecto bioestimulador
Estos productos no aportan volumen, sino que actúan como estimulantes del colágeno y la elastina, logrando una regeneración cutánea visible desde el interior. Los resultados aparecen de forma progresiva, mejorando la textura, firmeza e hidratación de la piel de manera natural.
Los beneficios de este tratamiento son múltiples y hacen que cada vez más pacientes lo elijan como alternativa a los procedimientos invasivos:
Estimula la producción de colágeno y elastina
Mejora la firmeza, elasticidad e hidratación de la piel
Incrementa la luminosidad y la calidad general del tejido cutáneo
No modifica los rasgos naturales ni genera volumen
Ofrece resultados progresivos y de aspecto natural
Es biocompatible y no produce reacciones adversas
Se realiza de forma ambulatoria, sin necesidad de reposo
Este enfoque permite rejuvenecer el rostro sin perder su expresión ni naturalidad, respetando la armonía facial de cada paciente.
En la mayoría de los casos se recomiendan dos sesiones, con un intervalo de entre 30 y 40 días entre cada una. Sin embargo, en pacientes cuyo organismo responde más lentamente a la estimulación, puede ser conveniente realizar sesiones adicionales para potenciar los efectos.
El Dr. Sevinsky evalúa cada caso de forma personalizada para definir el plan de tratamiento más adecuado, teniendo en cuenta las necesidades específicas y los objetivos estéticos de cada persona.
Aunque los bioestimuladores ofrecen excelentes resultados en muchos casos, es importante tener en cuenta sus limitaciones. En situaciones de flacidez severa o pérdida importante del volumen facial, este tratamiento puede no ser suficiente por sí solo. En esos casos, el Dr. Sevinsky podría sugerir otras opciones, como una intervención quirúrgica, para lograr una mejora visible y sostenida.
Cada sesión tiene una duración aproximada de 45 minutos. Se trata de un procedimiento rápido y ambulatorio que no requiere anestesia general ni internación.
Después de la aplicación, el paciente puede retomar sus actividades habituales de inmediato. No obstante, es posible que aparezca una leve inflamación o pequeños hematomas en la zona tratada, los cuales desaparecen por sí solos en pocos días.
Para garantizar una buena recuperación y maximizar los resultados, se recomienda:
Evitar el ejercicio físico intenso durante 24 a 48 horas
No exponerse al sol de forma directa
Evitar tratamientos faciales o procedimientos agresivos durante las primeras 48 horas
Estos cuidados simples permiten que el tratamiento evolucione de manera óptima y sin complicaciones.
Los bioestimuladores representan una excelente alternativa para quienes buscan rejuvenecer el rostro de forma natural y sin cirugía, estimulando la regeneración propia del cuerpo. Su aplicación es segura, efectiva y personalizada, lo que permite lograr resultados visibles sin alterar la identidad facial.
Si estás interesado en mejorar la firmeza, hidratación y luminosidad de tu piel con un tratamiento mínimamente invasivo, te invitamos a dar el primer paso hacia una piel más saludable y rejuvenecida.
Solicitá tu consulta con el Dr. Sevinsky y descubrí si los bioestimuladores son el tratamiento ideal para vos.